viernes

César Vallejo: Un Poeta Universal (1892 - 1938)


¿Ud. cree señor Vallejo que colocar una imbecilidad encima de otra es hacer poesía?. Estas palabras constituyen una de las muchas críticas que el ahora llamado Poeta Universal recibió en vida, y le pertenecen nada más y nada menos que a Clemente Palma, personalidad de las letras peruanas en la época en que Cesar Vallejo era un oscuro poeta provinciano, de aspecto enfermizo y ceño fruncido (el mismo que ostenta en la ya clásica fotografía que ilustra esta página), con motivo del envío (desde su natal Santiago de Chuco) del "Poema a mi amada":


Amada, esta noche tú te has sacrificado
sobre los dos maderos curvados de mi beso;
y tu pena me ha dicho que Jesús ha llorado,
y que hay un viernes santo más dulce que ese beso.


No es de extrañar, pues, que el mismo Vallejo manifestara: Volveré al Perú sólo cuando quede piedra sobre piedra. Pese a ello, sus restos descansan en el cementerio de Montparnasse tal como lo dispuso su amada Georgette (la misma con quien mantuvo una tormentosa relación marital en los últimos cuatro años de su vida)

Sin embargo, la muerte nos regala milagros de vez en cuando; milagros como "Poemas humanos", "Trilce" o "España, aparta de mí este cáliz". Es que la escalada del "Cholo" por las escarpadas pendientes del dolor humano es una suerte de acrobacia suicida, de salto al abismo; y la ruptura formal acompaña el desgarro de un alma enferma de todo, del mundo y de sí misma.

Vallejo y el entorno intelectual de su época

César Vallejo comenzó a relacionarse tempranamente -como Bachiller en Letras de la Universidad de Trujillo - (1915)- con destacados artistas e intelectuales: Víctor Raúl Haya de la Torre, José Eulogio Garrido, Alcídes Spelucín, Macedonio de la Torre, entre otros, integrantes de "Norte", grupo liderado por Antenor Orrego.

A aquella época febril, sacudida por cambios sociales, políticos (mayor influencia de las Fuerzas Armadas y progresivo deterioro de la oligarquía) e ideológicos (irrupción de la filosofía marxista y del psicoanálisis), corresponden sus primeros versos publicados.

Ya en Lima hizo amistad con Manuel Gonzáles Prada y Abraham Valdelomar, e integró el grupo "Colonida", gracias a éste último, enriqueciendo su visión del mundo a través del contacto con nuevas corrientes europeas. A Gonzáles Prada -cuya muerte le afectó profundamente- le dedicó el poema "Los dados eternos": Para Manuel Gonzáles Prada esta emoción bravía y selecta, una de las que, con más entusiasmo, me ha aplaudido el gran maestro.

El Vallejo que comenzaba a beber ávidamente de las fuentes del marxismo, pronto comenzó a sentirse encerrado en ese círculo elitista que lo alejaba de las muchedumbres, lo aislaba de sus emociones (Mariátegui). "Colonida" no fue más que otra etapa, no menos importante que las que vendrían, que ahondó -luego de la muerte de su maestro Gonzáles Prada- la íntima desesperación y crisis permanente en que ya se encontraba inmerso el poeta.

Vallejo en Europa
A fines de 1923, el "cholo" viajó a Francia, donde llevó la difícil existencia del intelectual con los bolsillos vacíos. Para poder sobrevivir tuvo que dedicarse al periodismo y su producción poética se redujo sustancialmente.

Entonces, luego de algunas otras relaciones (entre ellas Henriette, una hermosa costurera con "lenguaje de cocotte"), apareció Georgette, quien vivía frente a la oscura pensión de Vallejo en la Rue Molière. Ernesto More, íntimo amigo del poeta en París, (...) el que vivió con él compartiendo mendrugos (...) fue testigo del luminoso amor del sudamericano pobre y la francesita venida a menos. Pero el romance no duró mucho luego del matrimonio (1934).

Comenzó a transformarse rápidamente frente a las penurias económicas, agravadas poco después al decaer la salud del poeta. Por aquella época, la mujer que compartió los últimos cuatro años de ese hombre enfermo y atormentado llegó a confiarle a More: Yo siempre estoy sola, con Vallejo o sin Vallejo.

Se diría que Vallejo vivió tan cerca a la muerte que ésta pasó a ser -quien sabe en medio de la resaca de alguna madrugada parisina, cuando el dolor se junta con las ganas de abandonarlo todo, hasta la vida- su confidente. Tal vez fue ella quien le dictó este poema, inexplicablemente premonitorio:

Me moriré en París con aguacero
un día del cual tengo ya el recuerdo.
Me moriré en París - y no me corro -
tal vez un jueves, como es hoy, de otoño.

Jueves será, porque hoy, jueves, que proso
estos versos, los húmeros me he puesto
a la mala y jamás como hoy, me he vuelto, con todo mi camino, a verme solo.

César Vallejo ha muerto, le pegaban
todos sin que él les haga nada;
le daban duro con un palo y duro
también con una soga; son testigos
los días jueves y los huesos húmeros,
la soledad, la lluvia, los caminos...


Vallejo, tan humanamente cercano en su poesía y tan desaprensivo con los seres que lo amaron, murió el 15 de abril de 1938, en una lluviosa tarde parisina.

Fuente: Radio San Borja

miércoles

Capitalismo nacional y capitalimso extranjero


Si nuestro objetivo es reconstruir el capitalismo nacional desde los jovenes debemos tener en cuenta la historia


¿Qué es un empresario y cuál es el papel que desempeña en el desarrollo capitalista de una nación?
El desarrollo capitalista de cualquier país está directamente vinculado al rol determinante que juega el empresario como motor del proceso de crecimiento. No hay desarrollo capitalista sin decenas o centenas de miles de empresarios operando en la economía. Pero, ¿qué es un empresario? En forma resumida, puede decirse que es un agente que produce bienes o servicios para su venta en el mercado y cuya racionalidad se define en términos de maximizar sus utilidades incurriendo en los mínimos costos posibles. Permanentemente el empresario adopta decisiones de asignación de recursos productivos orientadas por su objetivo de obtener más ganancias, reinvertirlas y seguir creciendo, diríase ad infinitum.

Esta tendencia a la permanente acumulación de capital y a su incesante reinyección en el proceso productivo no significa que al capitalista no le guste “vivir bien”. Es obvio que el empresario dedica parte de sus ganancias a la “buena vida”. Sin embargo, en términos relativos, sólo aplica una porción mínima de las utilidades en el consumo improductivo. Lo medular de sus ganancias sigue dedicándose a la reinversión productiva.

Para poder obtener sus utilidades, el capitalista contrata a empleados y obreros, en un régimen jurídico formalmente libre, les asigna un rol en su empresa, explota su fuerza de trabajo y les paga un salario.

¿Cuál es la actitud de los empresarios frente a la innovación?

El cambio y el crecimiento de una economía están vinculados a la necesidad de incorporar en ella permanentes innovaciones. Históricamente, los capitalistas de mayor éxito en el pasado y el día de hoy han sido y son aquellos que se convierten en innovadores económicos. Al respecto, existen teorías como la del economista austriaco Joseph Schumpeter que afirma que el rol fundamental del empresario es el de innovar. Al respecto, Schumpeter distingue cinco tipo de innovaciones:

– La creación de un nuevo bien o servicio o la mejora significativa en la calidad de un bien o servicio actualmente existente.

– La introducción de un nuevo método de producción.

– La apertura de un nuevo mercado de exportación. – La conquista de una nueva fuente de materias primas o insumos.

– La creación de un nuevo tipo de organización empresarial en particular la formación de un monopolio o trust.

El Perú es una nación subdesarrollada dentro del capitalismo. ¿Significa eso que no hemos tenido ni tenemos empresarios nativos capaces de dirigir el proceso de desarrollo del país?

La pobreza, el atraso y la marginalidad de la mayoría de la población peruana son rasgos de nuestro subdesarrollo capitalista. También son indicadores que no hemos tenido cualitativa ni cuantitativamente un empresariado que haya podido dirigir el proceso de desarrollo capitalista del país y cumplir con su compromiso histórico como clase social. Además, a muchos de nuestros capitalistas nativos les ha faltado el ímpetu de acumulación y expansión incesante y han demostrado escaso interés en innovar.

Si revisamos la historia republicana del Perú podemos observar que hemos tenido oportunidades de despegue económico que no fueron adecuadamente aprovechadas por nuestros capitalistas. Quizás el problema podría sintetizarse diciendo que en el Perú hemos tenido capitalistas de mentalidad feudal, en el sentido de que no han sido empresarios innovadores, frugales y emprendedores sino, por el contrario, han sido personajes que mayormente privilegiaron el vivir bien en el corto plazo, no reinvirtieron incesantemente y tampoco se diversificaron.

¿Existen ejemplos de esta afirmación?

Se pueden señalar tres casos específicos:

1. Los ingentes recursos del guano y del salitre fueron desperdiciados, tanto por los empresarios que estuvieron vinculados a ellos como por los beneficiados por la política de gasto público del estado peruano de mediados del siglo XIX. En el caso de los empresarios del guano –los conocidos como “consignatarios”– las utilidades que debieron ser dirigidas a reinversiones productivas diversificadas se utilizaron mayormente en el consumo suntuario y de ostentación dirigiéndose parte de ellas hacia otros países. En el caso de las utilidades captadas por el estado peruano, una parte se derrochó en obras improductivas y en ferrocarriles malamente planificados y otra fue canalizada hacia agentes económicos que aplicaron dichos recursos al consumo, al gasto de ostentación y no a la inversión. Por su lado, los empresarios extranjeros que obtuvieron utilidades del guano y del salitre aplicaron lo medular de estas ganancias fuera del país.

2. Los empresarios peruanos han desperdiciado diversas oportunidades que la historia les deparó, por ejemplo en la agricultura de exportación y en la explotación del petróleo y minerales a comienzos de siglo. Cuando revisamos las páginas de la historia económica del Perú nos encontramos con diversos ejemplos de ávidos empresarios extranjeros comprando tierras de pasivos propietarios peruanos. Los casos de la International Petroleum Company, la Cerro de Pasco Corporation y la Casa Grace nos muestran cómo los capitalistas extranjeros actuaban guiados por el criterio de la explotación y acumulación incesante de capital, en tanto que los propietarios peruanos buscaban sólo vender la tierra y obtener recursos financieros con los que podrían “vivir bien” a veces en el Perú, la mayor parte de veces en el extranjero.

3. Existen otros casos de organizaciones empresariales quebradas, como los del imperio Prado, el del empresario pesquero Banchero, y los ejemplos de los grupos Bertello y Nicolini en los que nuevamente observamos como nuestra clase capitalista nativa no se comportó como clase dirigente del proceso de crecimiento, incumpliendo su designio histórico.

Por supuesto, lo dicho no significa que no hayan existido, que no existan, o que no puedan existir empresarios peruanos que acumulen capital, innoven, reinviertan y se comporten racionalmente como capitalistas (lo que los obliga a no dispendiar con criterio feudal el escaso capital del país). Sin embargo, a través del tiempo, estos capitalistas han sido minoría entre los empresarios peruanos.

Si el capitalismo nativo peruano ha sido incapaz de desarrollar al país, ¿significa eso entonces que el desarrollo nacional deberá ser dirigido por los capitalistas extranjeros?

En general, el comportamiento de los capitalistas extranjeros cumple con el modelo señalado inicialmente de explotación insaciable, innovación y racionalidad. El problema con los empresarios del exterior radica en que ellos acumulan sus ganancias incesantemente pero las aplican fuera del país. De acuerdo con su propia racionalidad empresarial, cada año remiten sus utilidades al exterior y los directorios correspondientes, ubicados en Norteamérica, Japón o Europa, determinan la utilización de las ganancias, según las exigencias de sus necesidades corporativas y no en función de los intereses nacionales del Perú. Esta conducta del capitalismo extranjero se ve facilitada por el escaso o nulo condicionamiento al que es sometida la inversión del exterior, liberalidad que se justifica con la conocida explicación de “necesitamos capitales, vengan cómo vengan y vengan de dónde vengan”.

¿Qué conclusiones podemos obtener de estos hechos?

Al menos pueden obtenerse dos conclusiones. La primera es que los capitalistas nativos han sido incapaces de dirigir el proceso de crecimiento capitalista del Perú; la segunda es que los empresarios extranjeros no están interesados en el desarrollo integral de nuestro país.


De: http://cavb.blogspot.com/2006/07/el-capitalismo-nacional-y-el.html

domingo

EL PENSAMIENTO LATINOAMERICANO: SU HISTORIA Y PESRPECTIVAS


Por: Carlos Narvarro de Páginas Verdes
La filosofía latinoamericana ha tenido un extraño camino. Se inició con una polémica sobre la esencia de lo humano y la relación que pudiera tener ésta con los indígenas del continente americano.

Esta polémica comenzó cuando los conquistadores negaron el estatus antropológico de los indígenas en nombre del cristianismo basándose en tres planteamientos fundamentales:

-La "inferioridad natural" de los indígenas, lo que daba derecho a una Sociedad Superior sobre una inferior, según la tesis aristotélica

-Partiendo de la base de la primera tesis, los españoles argumentaban que los indígenas eran incapaces de organizar la vida social según los modelos europeos, por lo tanto el Estado Español debía de ayudarles a construir nuevas instituciones según el modelo de Estado Español.

-Por último los indígenas cometían pecados contra la religión católica ya que practicaban la idolatría, la sodomía y la barbarie.

Sin embargo a pesar de estos argumentos ideológicos el principal problema que tuvieron los españoles fue de orden teológico. Decidir si los indígenas nativos eran parte de la especie humana - y si deberían de ser tratados como súbditos del rey de España - o si sólo eran una "subespecie", que no tenían por que ser tratada como igual ni en tiempo de paz ni en tiempo de guerra.

Estos planteamientos desataron un debate que se conoce en la historiografía como la disputa de Valladolid, entre Bartolomé de las Casas y Juan Ginés de Sepúlveda. La sustentación de ambas tesis se basaron en el libro Historia General y Natural de las Indias del cronista Gónzalo Fernando de Oviedo.

Sepúlvedas argumentaba que la guerra en contra de los indígenas era permitida porque todos los indígenas eran bárbaros, carente de educación e inteligencia. Cometían pecados contra la naturaleza ya que Dios mismo ordenó según el Viejo Testamento la expulsión de los bárbaros de la Tierra Prometida. La ley Divina y natural, fundamentada en Santo Tomás de Aquino, consistía en llevar a los bárbaros a la fe sin excluir los medios no-pacíficos. Por eso, si los indios no obedecían a los españoles en aceptar la fe y su dominio, había que obligarlos por la fuerza.

Bartolomé de las Casas, contrario a la tesis de Sepúlveda le da otra interpretación al evangelio y a las teoría de San Agustín. Llega a la conclusión que solamente después de la conversión voluntaria al cristianismo de los indígenas, se puede decir que la conquista y la subordinación es legítima.

En la obra Apologética Historia, Bartolomé de las Casas resume sus argumentos de la siguiente manera:

1- El hombre moderno es el resultado de un proceso de desarrollo histórico y cada pueblo, en los orígenes de su existencia, se encontraba en el estado primitivo, igual como los pueblos indios de América.

2- Subraya que los indios tienen una cantidad de virtudes que surgen de su ambiente natural y sobresalen respecto a los europeos y algunos pueblos antiguos.

3-Concluye Las Casas que los indios ni son inferiores, ni bárbaros, sino que poseen las mismas condiciones para superar su estado como los pueblos antiguos de Europa.

El debate entre Sepúlvedas y Las Casas tuvo un alcance mucho más allá del tema americano. En el fondo la discusión contribuyó al cambio radical de los conceptos vigentes hasta aquel entonces sobre el universo y la historia de la humanidad. Este cambio puso en duda la visión del mundo como una unidad cultural con respecto al sistema político-espacial, también supuso un cambio respeto a la visión de la conquista y puso los fundamentos jurídico-políticos de la sociedad europea de aquella época.

Cuatro siglos más tarde, precisamente en el año de 1968, se va a dar una polémica entre Leopoldo Zea y Augusto Salazar Bondy sobre la autenticidad, la originalidad y la posibilidad de una filosofía (pensamiento) latinoamericano. El punto de partida fue el librito ¿ Existe una filosofía de nuestra América ?. En él Salazar Bondy revela la necesidad imperante de la sociedad latinoamericana de tener una filosofía auténtica capaz de servir a la intelección de la realidad, a la búsqueda de vías de desarrollo independiente y de la solución de problemas cardinales de nuestras sociedades.

No obstante, al analizar la situación filosófica en Latinoamericana, Bondy constata que ésta no ha sido todavía un pensamiento genuino y original, sino inauténtico e imitativo, por que la vida social alienada produce un pensamiento alienado y además alienante en su función encubridora de la realidad.

Salazar Bondy llega a la conclusión que la existencia de una auténtica filosofía nacional latinoamericana esta en estrecha relación con el estado socioeconómico de la sociedad.

Leopoldo Zea contesta la tesis de Salazar Bondy con su texto La filosofía americana como filosofía sin más, en donde se opone a la visión estereotipada de la filosofía que exige correspondencia con los sistemas de corte europeo. Zea, está en contra de quienes niegan la existencia o posibilidad de una filosofía en América Latina por la no existencia de sistemas y la aparente incapacidad de los latinoamericanos para crear sistemas. El indica que históricamente existían varias forma de filosofar, que lo mismo se expresan en un sistema ordenado que en una máxima, un poema, un ensayo, en una pieza teatral o en una novela. En el origen de la historia de la filosofía europea se encuentran no sólo los sistemas de Platón y Aristóteles, sino también poemas como el de Parménides, máximas como las de Marco Aurelio, pensamientos como los de Epicúreo, Pascal, etc.

De esta manera la filosofía latinoamericana puede desarrollarse con sus propias formas, pero eso no significa el olvido del rigor y el nivel teórico necesario. Según Zea, hay que hacer pura y simplemente filosofía, "filosofía sin más": lo americano se dará por añadidura.

Para Zea una filosofía es original no por producir sistemas exóticos, sino porque trata de dar respuesta a los problemas que una determinada realidad, y en determinado tiempo. Tal filosofía debe partir del hombre latinoamericano, proyectarse a la universalidad y ofrecer soluciones a los problemas tanto del latinoamericano, como de los demás pueblos.

Estas características apuntadas por Leopoldo Zea hará que nuestra filosofía se elabore con instrumentos que brinde la realidad histórica, y esta realidad dialécticamente configurará un sentido específico de originalidad y autenticidad en el pensar. Originalidad que se expresa en la no repetición de problemas ajenos y autenticidad como expresión de lo específico, de lo nacional.

A la posición universalista de Salazar Bondy y a la postura culturalista de Zea se suma postura critica surgida en los anos sesenta. El argumento principal de los que adoptan esta tesises que rechazan la existencia de una filosofía latinoamericana porque hasta ahora la filosofía en América Latina ha sido ideológica y no una empresa libre. La filosofía se ha usado y se usa en la América Latina, según los partidarios de este punto de vista, para sustentar ciertas ideas que permitan la continuación del statu quo y el beneficio de ciertas clases sociales. Los promotores de esta postura senalan, por ejemplo, el caso de la escolástica y del positivismo.

Después de esta polémica, bajo el empuje de Leopoldo Zea el interés por investigar la historia de la ideas en Latinoamérica, ha ido aumentando cada día, a tal punto que el día de hoy se publican revistas, libros, existen Institutos especializados de investigación, se dan congresos, conferencias y desde hace casi cincuenta años se instalo el Comité de historia de las ideas cuyo mayor logro ha sido la publicación de una serie de estudios sobre la historia del pensamiento latinoamericano por países.

Incluso en los Estados Unidos, Italia, Alemania, España y en otros países existen centros de estudios y cátedras especializadas en donde se estudia nuestro pensamiento. Próximamente bajo la dirección de los profesores Guillermo A. Lousteau y Salvador María Losada se publicará una ambiciosa serie de veintidós volúmenes para cubrir el pensamiento de España y de América Latina.

martes

El Perú envuelto en el mito del desarrollo


"Crecer no es desarrollo, crecer en base a productos primarios mineros lo es menos."

Oswaldo de Rivero (publicado en Red Voltaire). Embajador de la misión diplomática del Perú ante la ONU en New York durante el mandato del presidente Alejandro Toledo.

Muchos creen hoy que el crecimiento del PNB (Producto Nacional Bruto) del Perú, es la señal de que la economía ha entrado en un ciclo virtuoso que lleva al desarrollo. Crecer no es desarrollo, crecer en base a productos primarios mineros lo es menos. El Perú siempre ha exportado productos mineros y nunca ha logrado convertirse en un país desarrollado. ¿Por qué ahora muchos creen que esta bonanza cíclica de los precios de los minerales nos llevará al desarrollo?
Muchos creen hoy que el crecimiento del PNB (Producto Nacional Bruto) del Perú, es la señal de que la economía ha entrado en un ciclo virtuoso que lleva al desarrollo. Crecer no es desarrollo, crecer en base a productos primarios mineros lo es menos. El Perú siempre ha exportado productos mineros y nunca ha logrado convertirse en un país desarrollado. ¿Por qué ahora muchos creen que esta bonanza cíclica de los precios de los minerales nos llevará al desarrollo?
Esta bonanza cíclica de los minerales se origina como siempre por factores externos y cesará también por factores externos. Hoy depende concretamente de la fuerte demanda internacional, en particular de la China, y también de la gran especulación en las bolsas del mundo.
La historia de nuestro subdesarrollo es una saga de bonanzas y terribles crisis de las exportaciones producidas por factores externos. Como fueron las bonanzas y las crisis del guano, el salitre y el caucho en el siglo XIX y las bonanzas y crisis de los minerales en el siglo XX.
En ningún caso las bonanzas temporales de las materias primas han disminuido la pobreza en el Perú. Al contrario, la exportación de materias primas combinada con el gran crecimiento de la población, en particular la urbana, a través de más de 180 años de independencia, han hecho que la pobreza en el Perú se vuelva hereditaria y hoy afecta a casi la mitad de la población peruana.
Las recientes informaciones del Instituto Peruano de Estadísticas (INEI) demuestran que la bonanza de los precios de los minerales y de las exportaciones no ha servido para disminuir la desigualdad del ingreso y la pobreza. Desde 1991 los salarios en el Perú que eran el 30% del PIB han bajado hasta llegar en el 2005 al 22,9. Entonces, no es nada extraño que esta baja de los salarios unida a las tasas altas de desempleo y subempleo origine una constante turbulencia social en el Perú y también una creciente emigración. En verdad, nada demuestra más el fracaso del desarrollo nacional en el Perú que el tsunami de refugiados económicos peruanos en extranjero.
Ningún analista internacional, académico o banquero privado serio considera que el Perú está en un proceso de desarrollo, solo porque su PNB crece debido a exportaciones primarias, en particular, a exportaciones des minerales, que son el 60% de ellas. Estos especialistas ven al Perú como una economía primaria, tradicional, poco competitiva, incrustada en una sociedad muy pobre, donde la mitad de su población vive con 2 dólares y en una constante agitación social.
Los analistas internacionales privados, a diferencia de las burocracias internacionales del Banco Mundial y de las Naciones Unidas, consideran que los pobres son mas de la mitad de la población en el Perú porque también son personas pobres, las que ganan 3, 4 y hasta 6 dólares diarios Acaso no es pobre, dentro de una economía global, una persona con 6 dólares diarios, 180 dólares al mes. Lo que pasa es que la burocracia internacional ha puesto la barra de la extrema pobreza muy baja, en 1 dólar diario y el de la pobreza, en 2 dólares diarios. Entonces, cualquiera mejora de esta paupérrima situación, para estos tecnócratas es vencer la pobreza, o sea cuando los habitantes de un país tienen 3 dólares diarios (90 dólares al mes) ya no son pobres!
La pobreza es la consecuencia del subdesarrollo no la causa. Hoy, el mayor obstáculo al desarrollo que tiene países como el Perú y los latinoamericanos es de naturaleza cultural. En efecto, desde la independencia todos estos países han demostrado una falta de vocación histórica por las ciencias matemáticas, físicas, químicas y biológicas y también por la investigación y desarrollo de tecnologías, derivadas de estas ciencias, para innovar constantemente su producción nacional.
Como consecuencia de esta histórica falta de vocación por la ciencias exactas y naturales, las sociedades de América Latina son hoy verdaderas “culturas acientíficas”, sociedades donde casi todo el conocimiento y el discurso es histórico, jurídico, sociológico, económico o literario; donde se prefiere la letra que el logaritmo, la retórica que el experimento, la creencia antes que la duda científica. El resultado es que casi no existen programas de Investigación y Desarrollo científico (R&D) que son los que hacen, en esta era de la innovación, la diferencia entre riqueza y pobreza, entre desarrollo y subdesarrollo, entre Asia y América Latina.
Los países entrampados en culturas acientíficas, como los latinoamericanas, son solo capaces de producir y exportar recursos naturales y manufacturas con muy bajo contenido tecnológico, las cuales siempre tienen menos valor que los productos de alto contenido tecnológico que importan. En consecuencia, estos países no pueden acumular recursos para satisfacer la modernización que exige su creciente expansión urbana. Ante esta situación no tienen otra alternativa que endeudarse permanentemente para comprar el progreso científico y tecnológico que no saben producir.
Así, la causa profunda del subdesarrollo no es económica sino cultural. Los economistas siempre han ignorado las explicaciones “culturales” del desarrollo. Para ellos solo las formulas económicas explican la riqueza de las naciones. Simplemente, esto no es así. La experiencia empírica muestra, por ejemplo, que un país puede practicar la más radicales formulas de libre mercado pero si sigue entrampado en una cultura acientífica, seguirá siendo una sociedad atrasada, endeudada y pobre porque exportara siempre recursos naturales y productos con poco contenido tecnológico que tienen menos valor que el progreso científico que constantemente tiene que importar.
Hoy, solo un 10 % de los científicos del mundo está en los países en desarrollo, el 90 % de este porcentaje, está Asia, repartido entre Taiwán, Corea del Sur, Singapur, Malasia, China y la India. Estos países asiáticos son los únicos que, aparte de los Estados Unidos, Japón y la Unión Europea, registran anualmente cientos de patentes de invención en la Organización Mundial de la Propiedad Industrial.
América Latina solo cuenta con el 0,7 % de los científicos de los países en desarrollo y no esta inventando nada. La región comparada con el Asia es un páramo científico-tecnológico. Salvo el Brasil, ningún otro país latinoamericano, gasta en Investigación y Desarrollo una suma ni siquiera cercana al 1% de su PNB. En el Perú la inversión en investigación científica y tecnológica es casi nula. El estado solo gasta el 0,03 del PNB, uno de los más bajas inversiones en R&D en la región.
Ninguna sociedad podrá salir, en el siglo XXI, del subdesarrollo sólo con conocimientos restringidos a las humanidades y las ciencias sociales. Estos conocimientos son indispensables, pero no son suficientes para entrar en un verdadero proceso de desarrollo. Es por estas razones que la humanidad ingresa a su tercer milenio como una sociedad planetaria dual, dividida. De un lado, una minoría próspera de países que viven del esfuerzo intelectual científico, que inventan e innovan productos y servicios. Del otro, una mayoría de países pobres, como el Perú y la América Latina, que siguen viviendo todavía del esfuerzo físico, de la explotación de recursos naturales y de labores burocráticas rutinarias, comprando cada vez mas caro el progreso científico y tecnológico que no pueden crear.
Entonces, para saber si un país esta “en desarrollo”, no hay que impresionarse con el crecimiento del PNB, alimentado por la bonanza temporal de exportaciones primarias, sino observar, si se están graduando mas científicos, ingenieros y tecnólogos que abogados, letrados, historiadores, sociólogos o psicólogos. Y sobre todo, verificar si el estado, las empresas, las universidades e institutos invierten en R&D para innovar constantemente la producción, tal como sucede hoy en Corea del Sur, Singapur, Taiwán, India, China y Malasia, que son hoy los únicos países que están en desarrollo o ya se desarrollaron
Una señal verdadera de que existe en el Perú un ciclo virtuoso hacia el desarrollo seria la existencia de una estrategia de estado para librarnos de la trampa de la cultura acientífica que nos mantiene hoy en el subdesarrollo. Una estrategia cuyas principales orientaciones serian una revolución educativa para lograr graduar igual o más científicos que letrados y un programa de inversiones en investigación y desarrollo científico-tecnológico para incrementar el contenido tecnológico de nuestra producción.
Esta señal no se esta dando en el Perú, ni tampoco en Latinoamérica, donde la cultura sigue siendo solidamente acientífica, donde las exportaciones siguen teniendo poco contenido tecnológico, donde el PNB, se incrementa pero la desigualdad social aumenta, donde los ricos viven en un paraíso vigilado, la clase media en un purgatorio y el pueblo en el infierno,


De : Oswaldo de Rivero - diplomático peruano

viernes

La idea del Capitalismo Nacional en desarrollo


La idea de un capitalismo nacional

"En nuestro proyecto ubicamos en un lugar central la idea de reconstruir un capitalismo nacional que genere las alternativas que permitan reinstalar la movilidad social ascendente. No se trata de cerrarse al mundo. No es un problema de nacionalismo ultramontano, sino de inteligencia, observación y compromiso con la Nación. Basta ver cómo los países más desarrollados protegen a sus productores, a sus industrias y a sus trabajadores."

El rol del Estado

"El mercado organiza económicamente pero no articula socialmente; debemos hacer que el Estado ponga igualdad allí donde el mercado excluye y abandona. Es el Estado el que debe actuar como el gran reparador de las desigualdades sociales en un trabajo permanente de inclusión y creando oportunidades a partir del fortalecimiento de la posibilidad de acceso a la educación, la salud y la vivienda, promoviendo el progreso social basado en el esfuerzo y el trabajo de cada uno. Es el Estado el que debe viabilizar los derechos constitucionales, protegiendo a los sectores más vulnerables de la sociedad."

Seguridad jurídica e impunidad

"La calidad institucional supone el pleno apego a las normas, en una Argentina que por momentos aparece ante el mundo como un lugar donde la violación de las leyes no tiene castigo legal ni social. A la Constitución hay que leerla completa. La seguridad jurídica debe ser para todos, no sólo para los que tienen poder o dinero. No habrá cambio confiable si permitimos la subsistencia de ámbitos de impunidad. Una garantía de que la lucha contra la corrupción y la impunidad será implacable fortalecerá las instituciones sobre la base de eliminar toda posible sospecha sobre ellas. Rechazamos de plano la identificación entre gobernabilidad e impunidad que algunos pretenden. Gobernabilidad no es ni puede ser sinónimo de impunidad. Gobernabilidad no es ni puede ser sinónimo de acuerdos oscuros, manipulación política de las instituciones o pactos espurios a espaldas de la sociedad."

Pobreza y desempleo

"Profundizar la contención social a las familias en riesgo, garantizando subsidios al desempleo y asistencia alimentaria. Consolidando una verdadera red federal de políticas sociales integrales para que quienes se encuentran por debajo de la línea de pobreza puedan tener acceso a la educación, la salud pública y la vivienda. Reinstalar la movilidad social ascendente que caracterizó a la República Argentina requiere comprender que los problemas de la pobreza no se solucionan desde las políticas sociales sino desde las políticas económicas. Sabemos que hay que corregir errores y mejorar métodos en la forma de asignación de la ayuda social. Pero es imprescindible advertir que la tragedia cívica del clientelismo político no es producto de la asistencia social como gestión del Estado, sino de la desocupación como consecuencia de un modelo económico."

Educación

"Debemos garantizar que un chico del Norte tenga la misma calidad educativa que un alumno de la Capital Federal. Es correcto que las provincias dirijan y administren el sistema de prestación del servicio educativo, pero el Estado nacional debe recuperar su rol en materia de planificación y contenidos de la educación y sistemas de formación y evaluación docente."

Salud

"Es objetivo de gobierno concretar un Sistema Nacional de Salud, que se consolidará en una red en la que el hospital público será un eje referencial, con los demás centros de salud, públicos o privados, para ser pilares estratégicos de la atención primaria de salud, integrándose con las políticas de contención social para avanzar en la tarea de prevención.

El objetivo de dar salud a los argentinos impone que se asuman políticas de Estado que sean impermeables a las presiones interesadas, por poderosas que sean, provengan de donde provengan."

Seguridad

"El cumplimiento estricto de la ley que exigiremos en todos los ámbitos debe tener presentes las circunstancias sociales y económicas que han llevado al incremento de los delitos en función directa del crecimiento de la exclusión, la marginalidad y la crisis que recorren todos los peldaños de la sociedad.

Pero también hay que comprender que, como sociedad, hace tiempo que carecemos de un sistema de premios y castigos.

En lo penal, en lo impositivo, en lo económico, en lo político, y hasta en lo verbal, hay impunidad en la Argentina. En nuestro país, cumplir la ley no tiene premio ni reconocimiento social."

Economía

"En el plano de la economía es donde más se necesita que el Estado se reconcilie con la sociedad.

No puede ser una carga que termine agobiando a todas las actividades, ni igualándolas hacia abajo con políticas de ajuste permanente a los que menos tienen.

El objetivo básico de la política económica será el de asegurar un crecimiento estable, que permita una expansión de la actividad y del empleo constante, sin las muy fuertes y bruscas oscilaciones de los últimos años.

El resultado debe ser la duplicación de la riqueza cada quince años, y una distribución tal que asegure una mejor distribución del ingreso y, muy especialmente, que fortalezca nuestra clase media y que saque de la pobreza extrema a todos los compatriotas."

Obra Pública y Trabajo

"Tenemos que volver a planificar y ejecutar obra pública en la República Argentina, para desmentir con hechos el discurso único del neoliberalismo que las estigmatizó como gasto público improductivo.

No estamos inventando nada nuevo, los Estados Unidos en la década del treinta superaron la crisis económico-financiera más profunda del siglo de esa manera."

Ajuste y endeudamiento

"No se puede recurrir al ajuste ni incrementar el endeudamiento. No se puede volver a pagar deuda a costa del hambre y la exclusión de los argentinos generando más pobreza y aumentando la conflictividad social.

La inviabilidad de ese viejo modelo puede ser advertida hasta por los propios acreedores, que tienen que entender que sólo podrán cobrar si a la Argentina le va bien. Este modelo de producción, trabajo y crecimiento sustentable y con reglas claras generará recursos fiscales, solvencia macroeconómica y sustentabilidad fiscal creando las condiciones para generar nuevo y mayor valor agregado. Tiene además que permitir negociar con racionalidad para lograr una reducción de la deuda externa."

Deuda Externa

"Sabemos que nuestra deuda es un problema central. No se trata de no cumplir, de no pagar. No somos el proyecto del default. Pero tampoco podemos pagar a costa de que cada vez más argentinos vean postergados su acceso a la vivienda digna, a un trabajo seguro, a la educación de sus hijos o a la salud.

Creciendo nuestra economía crecerá nuestra capacidad de pago."

Política exterior

"Partidarios en la política mundial de la multilateralidad como somos, no debe esperarse de nosotros alineamientos automáticos sino relaciones serias, maduras y racionales que respeten las dignidades que los países tienen.

Nuestra prioridad en política exterior será la construcción de una América latina políticamente estable, próspera y unida con base en los ideales de democracia y justicia social.

Venimos desde el Sur de la Patria, desde la tierra de la cultura malvinera y de los Hielos Continentales, y sostendremos inclaudicablemente nuestro reclamo de soberanía sobre las Islas Malvinas.

El Mercosur y la integración latinoamericana deben ser parte de un verdadero proyecto político regional. Nuestra alianza estratégica con el Mercosur, que debe profundizarse hacia otros aspectos institucionales que deben acompañar la integración económica, y ampliarse abarcando a nuevos miembros latinoamericanos, se ubicará entre los primeros puntos de nuestra agenda regional.

Una relación seria, amplia y madura con los Estados Unidos y los Estados que componen la Unión Europea es lo que debe esperarse de nosotros.

Discurso de Nestor Kirchner

martes

El Pensamiento Lateral, Vertical y Holístico


Nuestro cerebro usualmente enfrenta los problemas desde el lado racional. Fundamentamos nuestras respuestas por lo aprendido con una base histórica y con un enfoque plenamente lógico, pero en muchos casos será importante abordar ciertas circunstancias con otra óptica.
El término "Pensamiento Lateral" fue acuñado por Edward De Bono, en 1967, para diferenciarlo del pensamiento lógico, al cual llamó “Pensamiento Vertical”. De Bono encuentra en el pensamiento lógico que es fundamentalmente hipotético y deductivo, una gran limitación de posibilidades cuando se trata de buscar soluciones a problemas nuevos que necesitan nuevas ideas.acertijos
Los dilemas del pensamiento lateral son situaciones extrañas para nuestro cerebro y requieren una explicación. Cuando exponemos algo que debe ser resuelto, parecen muy difíciles de solucionar, pero al final, al conseguirlo, generan gran placer de logro. Pensar lateralmente evitando lo lógico o lo obvio se podrá convertir en una excelente herramienta para enfrentar viejos y nuevos problemas con nuevas ideas. El Pensamiento Lateral actúa liberando la mente del efecto polarizador de las viejas ideas y estimulando las nuevas y lo hace mediante la astucia, la creatividad y el ingenio, procesos mentales con los que está profundamente unido. En vez de esperar que estas tres características se manifiesten de manera espontánea, De Bono plantea el uso del pensamiento lateral de manera conciente y deliberada, como una técnica.

El Pensamiento Vertical

Guilford, en 1951, clasificó el pensamiento productivo en dos clases: convergente y divergente. El pensamiento convergente se mueve buscando una respuesta determinada o convencional y encuentra una única solución a los problemas que suelen ser conocidos. Es el pensamiento lógico, convencional, racional o vertical.

Mientras tanto el pensamiento divergente se mueve en varias direcciones en busca de la mejor solución para resolver problemas a los que siempre enfrenta como nuevos, sin mantener patrones de resolución establecidos, pudiéndose así dar una generosa cantidad de resoluciones adecuadas en vez de encontrar una única y correcta, como lo mencionamos anteriormente.

El Pensamiento Holístico

Holismo es la palabra que describe la tendencia de la naturaleza a crear conjuntos mediante el ordenamiento o agrupación de muchas unidades. En 1927 el mariscal de campo Jan Smuts, experto agrónomo y militar acuñó el término “Holismo” en su libro "Holism and Evolution".

El pensamiento holístico percibe las cosas en su conjunto y no analiza sus partes. Ve el bosque más que los árboles
. Según Smuts, las realidades básicas naturales son conductos irreductibles que no es posible separar para analizarlos según sus componentes sin perder su cualidad "holística".

Este tipo de pensamiento es muy importante para el desarrollo de la creatividad pues permite a los líderes, directivos, científicos o artistas a considerar las distintas situaciones y oportunidades como un "todo". Los líderes empresariales deben ver las situaciones como un todo, para así evaluar la incidencia de los diferentes impactos independientes o relacionados en el gran impacto se genera sobre el resto y el todo.

El trabajo en equipo es un concepto holístico con resultados sinérgicos. En un equipo cohesionado, el todo es mayor que la suma de sus partes. El director de orquesta tiene la responsabilidad sobre el "todo", cada uno de sus músicos ejecutan la parte de la partitura que les corresponde. El Director de Orquesta debe tener el pensamiento holístico sobre sí mismo, sobre el resto, sobre el todo.

El conocimiento sistémico una esperanza para el ser humano


El hombre entendió y aplicó el conocimiento de la realidad de una manera aislada.
Parece ser que el hombre por su ignorancia, no pudo manejar ni comprender todas las variables de la realidad, por tanto comenzó a conocerla de una manera parcial, limitada y distorsionada, entendió las disciplinas, la espiritualidad y las diferentes ciencias tanto fácticas, formales y sociales de manera separada.

La economía actual no tiene en cuenta la ecología ni la psicología.
Para la cultura occidental, se entiende la economía separada de la ecología y resulta que los recursos naturales son la principal fuente de recursos económicos, la economía actual ha llevado al hombre a depredar el medio ambiente y por eso hoy en día, el mismo hombre se está enfrentado a la destrucción de su planeta y de él mismo; también podemos ver que la economía actual no tiene en cuenta la psicología y resulta que los hombres, son los que le dan el significado a las cosas y además son quienes elaboran y prestan los bienes y servicios. En la economía actual, los negocios más rentables parecen nacer de la enfermedad mental y son: las armas, las drogas, la prostitución, la pornografía, la superstición, los juegos de azar, la vanidad y el espectáculo, curiosamente todo aquello que significa ilusión. Si las personas no tienen salud mental, seguramente todos los bienes y servicios que realizarán, van a estar enfocados en satisfacer necesidades de una distorsionada y enferma percepción de la realidad.
El derecho no tiene en cuenta la psicología.
El derecho actual trata de organizar una sociedad basada en las percepciones individuales de unos legisladores, que no tienen el más mínimo conocimiento del comportamiento humano, lo que ocasiona errores fatales de injusticia social, como por ejemplo: pensar que una mente enferma y antisocial, producto del mismo desamor de la organización social, va a cambiar y a mejorar a través de la absoluta violación de los derechos humanos en las cárceles.
El hombre es el único ser de la naturaleza que se ha salido del sistema de vida.
El hombre es el único elemento que no está sincronizado y en armonía con toda la naturaleza y se ve reflejado en la destrucción del medio ambiente a través de la contaminación y depredación del ecosistema.
El origen del problema según la teoría científica.
Esta teoría argumenta que durante el proceso de la evolución del conocimiento o en el proceso de la construcción de la cultura, es decir: al ir descubriendo el hombre su entorno, obviamente se iba a equivocar en su percepción de la realidad, simplemente porque era un ser ignorante y por tanto no tenía una base de datos con la cual reconocer ni comparar todo lo que se le presentaba y al ir descubriendo con un método de prueba y error, obviamente iba a adquirir una percepción de la realidad limitada, distorsionada y separada, porque para él era imposible manejar todas las variables de la realidad y del sistema general.
El conocimiento sistémico una esperanza para el ser humano
Pero lo más importante es que hay una esperanza para el hombre, si en este momento es humilde y relaciona todo el conocimiento que nos brinda la ciencia, las diferentes disciplinas, las espiritualidades, podrá darse cuenta que la realidad es un sólo sistema de vida, y que él puede pertenecer a este sistema de manera racional.
Hoy en día el hombre está relacionando diferentes conocimientos.
El hombre de hoy, gracias a sus avances y conocimiento, cada vez puede tener un mejor manejo de todas las variables de la realidad, que lo llevan en el caso de la medicina a reconocer que la psiquis del hombre puede crear una enfermedad física en el cuerpo, a lo que se llama somatizar las preocupaciones o depresiones. La medicina comienza a reconocer que la mente y el estado de ánimo de los pacientes, influyen tanto en los síntomas de un enfermedad física como en su curación.
El conocimiento sistémico nos ayuda a transformar la realidad
El conocimiento sistémico nos lleva a entender más ampliamente toda la realidad y las diferentes variables de ella, para poderlas modificar y así obtener el resultado que queremos, nos ayuda a confrontar los diferentes conocimientos para confirmar el funcionamiento del sistema general y descubrir las leyes naturales, espirituales y del comportamiento humano, el hombre debe comenzar a relacionar la biología, la psicología, la ecología y las ciencias sociales, para construir una sociedad que realmente esté de acuerdo con el sistema general de vida, debe comenzar a relacionar la psicología, la espiritualidad, la medicina y la ecología para conocer realmente


Autor: Francisco Galiano Marín

Equilibrio de Nash y Pensamiento Sistémico


«Si hay un conjunto de estrategias con la propiedad de que ningún jugador puede beneficiarse cambiando su estrategia mientras que los otros jugadores no alteren la suya, entonces ese conjunto de estrategias y sus beneficios correspondientes constituyen un equilibrio».


John Forbes Nash.
Non-cooperative games (1950).
Premio Nobel de Economía (1994).
Tesis doctoral de J.F.Nash (original)

Desde cierto punto de vista se podría considerar que el equilibrio de Nash está más próximo al Pensamiento Sistémico que la idea del cada cual para sí mismo de la mano invisible de Adam Smith. El cada cual maximiza sus ganancias como principio rector de las decisiones individuales frente a la idea de tener presente las decisiones de los demás.

Mediante su importante contribución a la Teoría de Juegos creada por John von Neumann y Oskar Morgenstern (una tesis doctoral de apenas 27 páginas que fue la base de sus trabajos posteriores y le reportó el Premio Nobel de Economía en 1994 compartido con John Harsanyi y Reinhard Selten, una vez superada una grave enfermedad mental como retrató la película Una mente maravillosa de Ron Howard) John Nash justificaba que «lo que beneficia al grupo, beneficia al individuo», una idea-fuerza en las antípodas de Adam Smith y de su obra La riqueza de las naciones donde se postula su famosa metáfora «al buscar satisfacer sus propios intereses, todos los individuos son conducidos por una “mano invisible” que permite alcanzar el mejor objetivo social posible. Por ello, cualquier interferencia en la competencia entre los individuos por parte del gobierno será perjudicial».

Sin embargo esta contradicción puede no ser tal desde una perspectiva sistémica, donde la realidad no se ve como una línea recta del tipo causa-efecto sino como un círculo donde causa y efecto se influyen y retroalimentan mutuamente. Esta visión es habitual en el Pensamiento Sistémico donde la realidad se percibe como un todo interconectado. De este modo la afirmación «lo que beneficia al grupo, beneficia al individuo» de John Nash o su contraria «lo que beneficia al individuo, beneficia al grupo» que se deduce de la metáfora de la “mano invisible” de Adam Smith no serían ideas antitéticas sino complementarias desde un punto de vista sistémico, porque, al fin y al cabo ¿dónde comienza un círculo?.

La idea-fuerza subyacente al equilibrio de Nash es sencilla y elegante: incluso en “juegos no cooperativos” donde no existan pactos que cumplir, existen oportunidades para buscar equilibrios que beneficien al conjunto de los jugadores en tanto en cuanto ningún jugador se beneficia cambiando su estrategia mientras los demás no cambien la suya, que es tanto como decir la búsqueda de un óptimo en el sentido de que la elección estratégica de cada jugador es la respuesta óptima a las elecciones estratégicas de los demás jugadores.

Ahora bien, alcanzar tal equilibrio no es fácil. Para empezar hay que desterrar la idea de unilateralidad. El equilibrio de Nash es incompatible con una elección unilateral. En mi opinión esto tiene profundas implicaciones sistémicas en el sentido de que destierra explícitamente algunas idealizaciones de la búsqueda del óptimo entendido como resultado de una elección unilateral, individual. Evidentemente amigo lector si usted se encuentra conduciendo un vehículo en Inglaterra no pretenda conducir por su derecha de manera unilateral con el pretexto de que eso es lo óptimo dado que en el resto de Europa se conduce por la derecha. Es más que probable que además de una multa o un accidente se encuentre en el ojo del huracán de un caos circulatorio provocado por su romántica idea de encontrar un óptimo a partir de una decisión unilateral. Para comenzar deberá reconocer que el juego de la conducción de vehículos admite dos equilibrios de Nash. Conducir por la derecha o por la izquierda. Simple. Que sea más óptimo un equilibrio que otro dependerá de la costumbre, la cultura, los acuerdos, las leyes, etc.

Si descartamos, con Nash, la idea de la unilateralidad como fuente de equilibrio tendremos que vérnoslas con la no menos fácil idea de la simultaneidad. “Puede que seas el único que lleva bien el paso, pero como los demás lleven el paso cambiado tienes un problema”. Sin simultaneidad en el cambio de estrategias no es posible encontrar un equilibrio de Nash, entre otras cosas porque siempre podría haber algún “espabilado” que se aproveche del grupo, haciendo como que alinea su decisión con la del grupo pero en realidad únicamente piensa en sí mismo, aunque, cuidado, la simultaneidad por sí misma no garantiza un óptimo para el conjunto, para el grupo. Esto mismo es lo que sucede en las situaciones de bloqueo donde dado lo que está haciendo el otro, ninguno de los dos quiere alterar su elección. Lo que más le conviene a uno depende de lo que haga el otro. Esta es una implicación profundamente sistémica. Desde esta perspectiva simultaneidad no significa telepatía, sino un “darse cuenta” de la interacción de mis opciones estratégicas con las del otro. Significa pensar en términos de co-afectación, co-inspiración, co-responsabilidad.

Ahora bien, no idealicemos el equilibrio de Nash pues por sí mismo no garantiza una decisión óptima para el conjunto. Recordemos que también existen fracasos colectivos derivados de decisiones racionales individuales pero irracionales para el conjunto. Recordemos sin ir más lejos la carrera de armamentos. Son elecciones óptimas desde la perspectiva individual, óptimos locales alejados del óptimo global. No nos confundamos: un equilibrio de Nash no presupone un juicio de valor sobre la bondad de la solución para todos los jugadores o sobre su impacto en el grupo en su conjunto. Precisamente porque se presupone tácitamente que el «cada cual para sí mismo» adamsmithiano sigue pesando en nuestra cultura occidental como principio rector de las decisiones de los demás. Es el castizo principio de piensa el ladrón que todos son de su condición o piensa mal y acertarás tan arraigado en la cultura popular.

Es por esta razón por lo que en el dilema del prisionero -un juego típico de “suma cero”- en los que los intereses de los jugadores están en estricta oposición, existe un único equilibrio de Nash: competir, acusar, traicionar al otro aunque esa solución sea colectivamente irracional pues los jugadores siempre salen perdiendo. En juegos donde exista un fuerte incentivo para que cada cual intente salirse con la suya el equilibrio de Nash anticipa que cualquier otro equilibrio será inestable mientras no se alteren los incentivos. En el dilema del prisionero se podría anticipar un atisbo de cooperación -equilibrio- si los presos -si pudieran comunicarse- decidieran una colusión para guardar silencio, pero este equilibrio sería inestable porque el incentivo de traicionar al otro estaría muy presente en el momento decisivo. Es por esto que el dilema del prisionero sólo puede resolverse en el contexto de un superjuego, es decir, un juego repetido. Felizmente la mayoría de juegos de la vida cotidiana son de “suma no cero” y esto significa que tenemos mucho margen de maniobra y muchos equilibrios de Nash a nuestro alcance, aunque no siempre la “solución” es evidente e inmediatamente reconocida por todos. Esto abre la puerta a la creatividad en la resolución de conflictos humanos.

En mi opinión, junto a las ideas de no unilateralidad y simultaneidad, la aportación sistémica del equilibrio de Nash se encuentra en la influencia que tienen las creencias -los modelos mentales que trataré en otra ocasión- para lograr una solución óptima global y en el reconocimiento de la vinculación profunda entre los jugadores que aún pretendiendo su ganancia máxima forman parte de un sistema mayor que la suma de sus intereses. La idea misma del equilibrio se fundamenta en la creencia implícita en la racionalidad de los otros, que deberían ser capaces de observar entre la gama de opciones a su disposición la que mejor encaja con sus intereses y con los del grupo en su conjunto.

Esta perspectiva sistémica trae aparejada la responsabilidad de comunicarse, aproximarse y entender las necesidades del “otro” ya que sin una interpretación correcta sobre las respectivas ideas de racionalidad no será posible el entendimiento y el «cada cual para sí mismo» dominará el juego. Esta responsabilidad pasa necesariamente por conocer en detalle cuál es el juego, quienes son los participantes, cuáles son sus opciones y sus preferencias y qué puede hacer cada cuál en función de las opciones y elecciones de los demás. Sobran los sobreentendidos y los acuerdos tácitos. Sin información correcta sobre el “otro” el juego está abocado al bloqueo o algo peor. Muchas guerras han nacido de una inadecuada interpretación de llamado “enemigo”. Esta responsabilidad se acentúa aún más si el “otro” pertenece a otra cultura, el “grupo” son los habitantes del mundo, la dimensión del “juego” es planetaria y existe un jugador que hay que tener presente si no queremos que termine el “juego” para todos: el medio ambiente. Porque, ¿hay alguien que crea que el medio ambiente es un jugador irrelevante, inerte y que no tiene preferencias?.

Así, cambiando de ámbito, para que la Alianza de civilizaciones patrocinada por el presidente español José Luis Rodríguez Zapatero sea algo más que un contrapeso retórico de El choque de las civilizaciones de Samuel Huntington hará falta algo más que buenas intenciones. Tal vez habría que llegar a un equilibrio de mínimos sobre lo que cada cultura está dispuesta a compartir y también a renunciar en aras de un bien común universal. Y para comenzar quizá nada mejor que definir muy bien cuál es el juego, quienes son los participantes, cuáles son sus opciones y preferencias, lo que temen perder lo que esperan ganar. Es decir, buscando un equilibrio -global- de Nash. Fácil, ¿no?.

Pero no perdamos la perspectiva sistémica. Desde mi punto de vista la Alianza de civilizaciones y otras iniciativas similares son un sub-juego de un juego mayor y prioritario, un juego que podríamos titular Alianza por la Tierra, un juego que jugamos todos, todos los días y cuyo fracaso puede hacer irrelevante cualquier equilibrio de Nash en los juegos de poder entre civilizaciones, culturas, religiones, países o mercados, pues cualquier sub-juego que no tenga presente las preferencias de ese sistema mayor al que pertenecemos todos -el medio ambiente- está abocado a una miopía y un cortoplacismo irresponsable, porque cualquier equilibrio sostenible a largo plazo se fundamenta sobre la naturaleza, pues al fin y al cabo es sobre el tablero de este pequeño planeta donde se juega el juego de todos los juegos: el juego de la vida. Pero de esto trataré más adelante.

DE: http://jmonzo.blogspot.com/

sábado

La Trampa del pensamiento lineal


Los seres humanos somos seres que aprendemos y en este aprender vamos conservando o cambiando un mundo que surge constantemente de las interacciones que efectuamos entre nosotros. Este construir colectivo es un proceso biológico natural cuando se realiza por medio de situaciones de consensualidad, estableciendo dominios de conducta a través de interacciones recursivas que están determinadas por los cambios estructurales coherentes que en ellos se producen debidos a su propia plasticidad estructural.

Aprender en el educar como proceso biológico natural y normal se constituye cuando niños, jóvenes y adultos conviven con el otro creando espacios de convivencia donde sus maneras de vivir se van haciendo cada vez más congruentes. Esto se construye sobre la base de aceptarse y respetarse a sí mismos, aceptando y respetando a los otros. Por lo tanto, la educación es convivir con el otro en respeto y dignidad. (Maturana, Humberto. 1999).

Por el contrario, cuando el mundo que se construye no es sobre la base de la consensualidad sino de la imposición y la violencia. Del no respeto por el legítimo otro que se manifiesta en profundas diferencias sociales, opresión de unos por otros, guerras y marginalidad que va acompañado de una educación que estimo no natural y normal porque reproduce esta forma no social de vida.

Al reproducir la educación estas formas de relacionarse de los humanos en su no aceptación mutua y desconocimiento de la dignidad de cada uno, el aprendizaje no transcurre como un proceso biológico porque no es capaz de construir espacios de convivencias y los seres humanos se van haciendo cada vez más incongruentes, distantes unos de otros, competitivos, agresivos, buscando el éxito personal construido sobre la base de la derrota del otro.

El pensamiento lineal

El aliado principal en la educación en todos sus niveles -y en particular en las universidades- que transmiten formas de convivencia no sociales en el sentido que no son solidarias y de respeto mutuo, es lo que se denomina pensamiento lineal.

Esta forma de pensar implica sólo una mirada local, cercana al problema que se analiza, creyendo encontrar las causas y relaciones que originan los problemas desde la inmediatez de su cercanía, teniendo presente las propiedades de esos procesos que le dan origen de acuerdo sólo a ciertos cambios necesarios en su entorno inmediato. El observador que trata de explicar un proceso puede incluso ser capaz de observar desde distintos dominios cognoscitivos, pero por lo general son todos ellos locales, porque sólo atiende y comprende esas relaciones locales y no las configuraciones sistémicas que en realidad le dieron origen.

El pensamiento y la acción local es incoherente y no se corresponde con las coherencias sistémicas. Es por ello un pensamiento falso que destruye la convivencia humana porque construye formas de pensar y empuja a la acción fuera de la lógica sistémica al que el o los problemas pertenecen.

Esta forma de pensar raya en el enfoque computacionalista de pensar que niega la conciencia como algo fundamental para la cognición, y negar la conciencia, es decir el "yo" en el aprendizaje es negar al mismo tiempo la existencia de puntos de vistas coherentes, unificados y constantes desde donde pensamos, percibimos y actuamos. Ello facilita la consagración del pensamiento lineal porque impide observar los procesos humanos en el marco de sus relaciones lógicas estructurales. (Varela, Francisco. 1996).

La trampa principal del pensamiento local radica en su efectividad operacional en la construcción del hacer, en su dinamismo en el fabricar, en su capacidad del diseño ingenieril. El pensamiento lineal es atractivo porque sólo pone atención a sus tremendas capacidades operacionales concretas, resaltando con ello la racionalidad causal local porque la ve como el único origen de la eficacia y efectividad del quehacer cotidiano. Pero es un pensamiento tramposo porque pierde de vista el contexto relacional sistémico donde sólo tiene sentido lo local. Olvida que el sentido de lo local se adquiere en la medida que se lo entiende integrado a una totalidad del cual forma parte. No hay que olvidar que lo local es la manera de existir de determinados atributos de la totalidad.

El pensamiento lineal ha transformado a la competencia como si fuera un fenómeno biológico natural, como si fuera el fundamento de la conducta social, haciéndonos olvidar que la sociedad es la naturaleza del ser humano, donde en convivencia, solidaridad y cooperación encontró siempre todo lo que lo humanizaba. El paso de la emulación cooperadora a la competitividad que ignora al otro y su correlato en la forma de pensar, - el pensamiento lineal-, transformó a la competitividad de fenómeno cultural a un fenómeno biológico constitutivo de la naturaleza humana.

La competencia es antisocial: ella ha creado abundancia para algunos y miseria para la mayoría; ha permitido la producción con apropiación exclusiva de pocos que enriquece a algunos y empobrece a muchos; es la causa principal del agotamiento del mundo natural por apropiación competitiva. La apropiación privada es un acto de exclusión y no de respeto de las necesidades del otro, desconociendo la legitimidad del otro sobre esa misma propiedad. El pensamiento lineal encubre todo esto con terciopelos de racionalidad, justificando como si fueran naturales las grandes concentraciones de riquezas y las guerras que se realizan para acrecentarlas y defenderlas, y reprimir a aquellos que se levantan en su contra desde el dolor y la desesperación de su marginalización y atropellos a su identidad y dignidad.

Pensamiento sistémico

Frente a estas trampas del pensamiento lineal que todo lo justifica con aparente racionalidad ocultando aquello que verdaderamente da origen a los diversos procesos, es necesario levantar con fuerza el pensamiento sistémico que nos muestra que todo cambio en las estructuras locales, que todo problema, surgen siempre en el marco de dinámicas coherentes con la totalidad que esos procesos locales integran.
El pensamiento sistémico revela las relaciones que determinados procesos tienen y que sobrepasan las simples circunstancias particulares. Los procesos humanos nos muestran la multiplicidad de los dominios de existencia que hombres y mujeres, y los sistemas que constituimos, tenemos. Y con ello la variedad de relaciones causales producto de nuestros diversos ámbitos de acoplamientos estructurales en que interactuamos. Desde esta perspectiva el enfoque sistémico ve lo local en relación con el contexto general en el cual está inserto. Aquí juega un rol fundamental en el conocer el "yo" consciente que construye puntos de vistas necesarios para percibir el entorno que rodea y gatilla los proceso que trata de conocer. Comprender esta situación es lo que permite superar el pensamiento lineal como forma tradicional de pensar y enseñar en la universidad y en el sistema educacional en general, integrando pensamiento sistémico con pensamiento lineal.

El razonar lineal es efectivo en la operacionalidad local pero su fundamento relacional adquiere efectividad real sólo cuando acompañado del pensar holístico, permite ver sus coherencias sistémicas con la sociedad toda y la biosfera desde la materialidad local del vivir cotidiano. De aquí, de acuerdo a Maturana emerge la sabiduría que consiste en vivir en un actuar circunstancial siempre comprendido desde el entendimiento sistémico temporalizado del entorno mayor al cual pertenece.

Sólo desde aquí podríamos comprender la relación que existe entre apropiación privada excluyente del otro con jerarquización patrística, control irrestricto de terceros, competitividad, guerra, rapiña y pobreza. Todo ello con notable ausencia de colaboración, participación, respeto por el otro y armonía natural, los cuales son los legítimos constituyentes de la verdadera vida social de los sistemas humanos.


Por Jaime Yanes Guzmán

martes

¿Cambio de época o época de cambios?


Los cambios de época no son una novedad para la humanidad; el último cambio histórico ocurrió hace más de 200 años, cuando la Revolución Industrial condujo a las sociedades desde el agrarianismo hacia el industrialismo, generando incertidumbre, discontinuidad, inestabilidad, desorientación, inseguridad, perplejidad y, por lo tanto, vulnerabilidad. Ahora, tres revoluciones--sociocultural, tecnológica y económica--están haciendo obsoleta la época del industrialismo y forjando la época del informacionalismo o sociedad de la información y el conocimiento.
Pero, ¿qué es una época histórica, cuándo cambia una época, y por qué diferentes grupos sociales y organizaciones de desarrollo se quedan vulnerables durante este fenómeno? Estas son preguntas fundamentales para comprender la génesis del actual cambio de época y la forma cómo este fenómeno aporta vulnerabilidad a todas las organizaciones de desarrollo.

El concepto de época histórica
Una época histórica es caracterizada por la dominación de un sistema de ideas, un sistema de técnicas y una institucionalidad--mecanismos institucionales--que viabiliza ambos sistemas. Por ejemplo, la época histórica del industrialismo pasó a caracterizarse por un sistema de ideas dominante, sintetizado por la metáfora de una máquina para interpretar el mundo y actuar sobre éste. Su sistema de técnicas está constituido por las tecnologías materiales--mecánicas, químicas y eléctricas--que han impulsado el paradigma del desarrollo industrial. Su institucionalidad fue establecida en torno a los Estados-Naciones, que deberían tener un alto grado de soberanía y autonomía, para la creación, gestión y perfeccionamiento de las reglas nacionales del juego de acumulación de capital, derivado de la racionalidad forjada por la Revolución Industrial, y del juego de la democracia, que se expandía bajo la racionalidad forjada por la Revolución Francesa.
En marco de las contradicciones propias de un cambio de época, otra época está siendo forjada: la época del informacionalismo o sociedad de la información y el conocimiento.

La génesis del actual cambio de época
La génesis del actual cambio de época está fuertemente asociada a tres revoluciones--sociocultural, económica y tecnológica, cuyos impactos cruzados (no necesariamente compatibles entre sí), están cambiando el sistema de ideas, el sistema de técnicas y la institucionalidad de la época histórica del industrialismo.
Revolución sociocultural
Desde los años 60, un conjunto de movimientos socioculturales está desafiando las bases de la civilización occidental y los valores de la sociedad industrial de consumo. Por ejemplo, los movimientos feministas, ambientalistas y por los derechos humanos, justicia étnica, igualdad social y participación democrática denunciaron: (i) los muchos absurdos derivados de la época del industrialismo, (ii) la vulnerabilidad de la humanidad y del Planeta, y (iii) la necesidad de un desarrollo sostenible. La preocupación es por la sostenibilidad de todas las formas de vida en el Planeta. Los cambios que tienen origen en esta revolución sociocultural, como la cuestión de la participación, la equidad de género, la valorización de lo social, la igualdad social, los derechos de las nacionalidades indígenas, la justicia étnica, la conservación de los recursos naturales, los derechos de los niños, el desarrollo humano, las redes de solidaridad y el desarrollo sostenible en general, no pertenecen a la época del industrialismo; ellos están cambiándola bajo una visión sistémica de mundo.
Revolución económica
A finales de los años 70, la crisis económica iniciada por dos choques en los precios del petróleo reveló el agotamiento del régimen de acumulación de capital de la época del industrialismo. Desarrollado en torno a una economía productiva basada en factores tangibles--tierra, capital y trabajo, y dependiente del Estado-Nación para las reglas nacionales del juego de acumulación, el régimen de acumulación del capitalismo industrial entró en crisis irreversible. Eso dio inicio a la formación de un régimen de acumulación de capital, de naturaleza corporativa, de carácter transnacional, de alcance global y dependiente de un factor intangible--información. Los cambios derivados de esta revolución económica, que integran a la llamada globalización
Revolución tecnológica
A mediados de los años 70, se inició una revolución en torno a la tecnología de la información, que ha influenciado otras revoluciones científicas y tecnológicas y ha penetrado a la mayoría de los medios y formas de comunicación. La dimensión microelectrónica de esta revolución hace posible la concepción de redes virtuales capaces de comprimir y eventualmente desmaterializar el tiempo histórico y el espacio geográfico. Por primera vez en la historia, la información es simultáneamente insumo y producto. Los cambios derivados de esta revolución tecnológica--la formación de redes virtuales, la integración electrónica de formas (texto, sonido e imagen) y medios de comunicación, la propuesta de la agricultura de precisión, la creación de oficinas-en-red, los libros virtuales, los espacios inteligentes (edificios, fábricas, oficinas y residencias, cuyas funciones básicas son manejadas por computadoras independientes de un operador humano) y el terrorismo cibernético, no pertenecen a la época del industrialismo, ellos viabilizan muchos de los cambios derivados de las revoluciones sociocultural y económica, bajo una versión sofisticada de la visión mecánica de mundo.

Las visiones del mundo y la construcción del futuro
Todo cambio de época genera conflictos y contradicciones, como resultado del enfrentamiento dialéctico entre diferentes visiones de mundo, que compiten entre sí para prevalecer en la época emergente. El actual cambio de época nos es una excepción
La visión mecánica del mundo, propone la metáfora de una maquina para interpretar al mundo: el mundo es una maquina racional.
La visión económica del mundo.- Intenta remplazar la metáfora de la maquina por la metáfora del mercado: el mundo es un mercado sin sociedades ni ciudadanos.
La visión holística del mundo, propone la metáfora de un sistema: el mundo es un sistema complejo multidimensional e interdependiente, cuya dinámica incluye múltiples funciones, conflictos y contradicciones. Bajo esta visión, las diferentes formas de vida son igualmente importantes, y los seres humanos son percibidos como ciudadano y gerenciados como talentos humanos.

tomado del Proyecto Nuevo Paradigma

viernes

NUEVOS ENFOQUES PARA EL DESARROLLO DE LAS MYPEs

En el presente artículo me voy a referir básicamente a los nuevos enfoques en materia de estrategia para el desarrollo competitivo de las PYMEs, por lo tanto no me voy a detener a comentar sobre la importancia que tienen estas unidades productivas para el crecimiento económico y social del país.

Si me interesa destacar que el desarrollo de las PYMEs exige una revisión de cómo la estructura económica y administrativa de un país fomenta su desarrollo, justamente sobre este aspecto quiero detenerme y como los nuevos enfoques exigen una adecuación profunda para los países en vías de desarrollo.

Se desprende de estos nuevos enfoques que el crecimiento de las condiciones de competitividad para las PYMEs depende de sí se logra desarrollar lo que se denomina un "sistema país" y este se orienta como un todo al crecimiento.

¿Qué quiere decir esto de "sistema país"?. Este es un aspecto central para comprender la nueva dinámica del desarrollo competitivo. Se hace cada vez más evidente (aunque algunos sigan pensando lo contrario) que el desarrollo no depende de las capacidades individuales de las empresas, sino que es cada vez más dependiente de la capacidad de todo un país para trabajar como un sistema. Es decir: diferentes componentes de un país interactuando, complementando funciones, intercambiando información y conocimientos, definiendo políticas concertadas, etcétera. En el sistema país deben participar, por supuesto las empresas, pero también el Estado, las universidades, los
centros tecnológicos, las organizaciones de la sociedad civil, los
agentes financieros.

Reflexionando y tomando en cuenta estos comentarios es necesario generar iniciativas para constituir una red de innovadores para el desarrollo empresarial en nuestra región, integrando las acciones de las universidades, estado, empresas y organizaciones sociales, primero para realizar un plan de competitividad que nos permita identificar nuestras ventajas comparativas y competitivas del mismo modo mercados potenciales tanto nacional e internacional.

El mundo se vuelve cada vez más complejo e interdependiente, debemos ser proactivos planificando nuestra interconexión con el mundo.

¿Qué es el Pensamiento Sistémico?

El pensamiento sistémico es la actitud del ser humano, que se basa en la percepción del mundo real en términos de totalidades para su análisis, comprensión y accionar, a diferencia del planteamiento del método científico, que sólo percibe partes de éste y de manera inconexa.

El pensamiento sistémico aparece formalmente hace unos 45 años atrás, a partir de los cuestionamientos que desde el campo de la Biología hizo Ludwing Von Bertalanffy, quien cuestionó la aplicación del método científico en los problemas de la Biología, debido a que éste se basaba en una visión mecanicista y causal, que lo hacía débil como esquema para la explicación de los grandes problemas que se dan en los sistemas vivos.

Este cuestionamiento lo llevó a plantear un reformulamiento global en el paradigma intelectual para entender mejor el mundo que nos rodea, surgiendo formalmente el paradigma de sistemas.

El pensamiento sistémico es integrador, tanto en el análisis de las situaciones como en las conclusiones que nacen a partir de allí, proponiendo soluciones en las cuales se tienen que considerar diversos elementos y relaciones que conforman la estructura de lo que se define como "sistema", así como también de todo aquello que conforma el entorno del sistema definido. La base filosófica que sustenta esta posición es el Holismo (del griego holos = entero).

Bajo la perspectiva del enfoque de sistemas la realidad que concibe el observador que aplica esta disciplina se establece por una relación muy estrecha entre él y el objeto observado, de manera que su "realidad" es producto de un proceso de co-construcción entre él y el objeto observado, en un espacio –tiempo determinados, constituyéndose dicha realidad en algo que ya no es externo al observador y común para todos, como lo plantea el enfoque tradicional, sino que esa realidad se convierte en algo personal y particular, distinguiéndose claramente entre lo que es el mundo real y la realidad que cada observador concibe para sí. Las filosofías que enriquecen el pensamiento sistémico contemporáneo son la fenomenología de Husserl y la hermeneútica de Gadamer, que a su vez se nutre del existencialismo de Heidegeer, del historicismo de Dilthey y de la misma fenomenología de Husserl.

La consecuencia de esta perspectiva sistémica, fenomenológica y hermenéutica es que hace posible ver a la organización ya no como que tiene un fin predeterminado (por alguien), como lo plantea el esquema tradicional, sino que dicha organización puede tener diversos fines en función de la forma cómo los involucrados en su destino la vean, surgiendo así la variedad interpretativa. Estas visiones estarán condicionadas por los intereses y valores que posean dichos involucrados, existiendo solamente un interés común centrado en la necesidad de la supervivencia de la misma.